Un rincón de palabras sueltas, de insensateces cotidianas y reflexiones perecederas expresadas con la imaginación limitada de un adulto y la sabiduría inagotable de un niño.
sábado, 20 de junio de 2009
Breve historia de la revolución tecnológica
Creced y multiplicaos, dijimos, y las máquinas crecieron y se multiplicaron.
Nos habían prometido que trabajarían para nosotros.
Ahora nosotros trabajamos para ellas.
Multiplican el hambre las máquinas que inventamos para multiplicar la comida.
Nos matan las armas que inventamos para defendernos.
Nos paralizan los autos que inventamos para movernos.
Nos desencuentran las ciudades que inventamos para encontrarnos.
Los grandes medios, que inventamos para comunicarnos, no nos escuchan ni nos ven.
Somos máquinas de nuestras máquinas.
Ellas alegan inocencia.
Y tienen razón.
Eduardo Galeano en "Espejos".
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6 comentarios:
Me encanta Galeano, cuán ciertas son las cosas que nos dice, por qué no le haremos caso...
Saludos!!
Obvio que era Galeano
:)
- las ciudades que inventamos para encontrarnos -
que genio...! :)
Me encantó tu blog!
Muy bueno este post... un groso el Señor.
jeje... me voy a tatuar a geleano en una nalga...
(no, mejor no)
pero todos ya sabemos que es grosisimo, ah de paso te comento las sospechas que tenia sobre Gale, eran sobre el texto que postee anteriormente, con el cual estoy bastante casi el 100% de a cuerdo.
Salutes
y ya no hay nada que sospechar.
Buen texto de Galeano! Nadie puede negar que ayudan, lástima que somos tan egoístas que decidimos usarlas solamente para satisfacer el hambre por MÁS de la posmodernidad.
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